El pasado 18 junio la delegación de Barcelona-Tarragona volvió a la carretera. Objetivo: El monasterio de las Santes Creus en la comarca de el Baix Camp en Tarragona, para luego volver a la infancia visitando también la icónica figura para moteros de todos los rincones de el Mazinger Z.
Habíamos quedado temprano, a las 8 en punto de encuentro en la gasolinera de Vilanova i la Geltrú ya que nos quedaba a medio camino para juntarnos con los compañeros de Tarragona. Desde allí comenzamos nuestra ruta siete Silver Readers, los irreductibles como nos bautizó Javi ese día , ya que durante la semana se nos fue cayendo gente por diversos motivos. La mañana se presentaba genial en unas carreteras con curvas, subidas y paisajes muy bonitos. Pasamos por una serie de pueblos tales como : Castellvi de la Marca, Els Monjos, El Pla de Manlleu y tras serpentear una carretera sinuosa pero preciosa llegamos a una pequeña pedanía: Querol, donde pudimos visitar el exterior de una antigua ermita románica. Continuamos camino por la C-37 hasta el Pont de la Armentera, donde cogimos la TP 2002 hacia Santes Creus en el municipio de Aiguamurcia dónde tomamos un frugal desayuno ya que nos esperaban en el famoso monasterio cisterciense y romanico del siglo XII.
Tras 2 horas de visita guiada, interesantísima por cierto, (podéis consultar sobre este sitio en internet) y un pequeño incidente con las llaves de la moto (soy un experto en dar la nota 😁) nos dirigimos hacia nuestra segunda meta: el Mazinger Z. Allí, tras las fotos de rigor bajo la estatua, almorzamos en el Restaurante Más de Plata donde nos pusimos las botas. Después del almuerzo decidimos volver a casa pero no sin antes hacer un café en la villa amurallada de Montblanc en Tarragona donde emulando al Presi, quisimos meter las motos en la plaza mayor hasta la cocina. Lo cual casi nos cuesta unos cientos de euros a cada uno. Hubieran sido probablemente los cafés más caros de nuestra vida. En definitiva, todo salió bien y pudimos regresar a casa después de pasar un día de lo más "Very Good, my Friend". Hasta la próxima Silver Readers.
José Ramón Pernas.
Socio 228
